Los orígenes de todo este miedo al número 13 y el viernes 13 están aún abiertas al debate
Este es un día al que la gente le tiene miedo o respeto pues muchos reorganizan sus planes de viaje, retrasan alguna cirugía a la que debían someterse o simplemente evitan mayor actividad por el potencial trágico de una idea colectiva de larga tradición.
Donald Dossey, científico avocado al estudio del comportamiento humano, dice que las personas "tienen miedo de que algo trágico o siniestro suceda en éste día". Dossey le dio el nombre en inglés a la Friggaatriscaidecafobia, la fobia al Viernes 13 –una prueba de que el científico no sufre de Hipopotomonstrosesquipedaliofobia, el miedo a la pronunciación de palabras largas.
La raíz de este miedo innato a este día parte, en algunos casos y en los extremos, en la fobia al número 13, la Triscaidecafobia. El supuesto número de mala suerte, según los Triscaidecafóbicos, es la razón detrás de la explosión del Apolo 13, pues despegó a la 1:13 pm exactamente (13:13) el 4/11/70 (cifras que suman 13 individualmente).
Pero los orígenes de todo este miedo al número 13 y el viernes 13 están aún abiertas al debate. Algunos dicen que el miedo al 13 tiene que ver con Jesucristo, que fue crucificado un viernes después de una última cena a la que asistieron 13 personas, uno de los cuales fue Judas Iscariote. En la corriente mística judía de la Cábala, son 13 los espíritus malignos mencionados. En el Tarot el 13 es el número de la muerte. En la Biblia, en el Apocalipsis, en el capítulo 13 se menciona y anuncia al anticristo.
En cuanto al Viernes 13, lo relacionan con un viernes 13 de octubre en el año 1307 en el que muchos Caballeros Templarios fueron arrestados y luego quemados por la Santa Inquisición. Los registros históricos indican que fue exactamente ese día. Los Caballeros Templarios eran reconocidos, en esa época, por ser prestamistas en Europa, una especie de precursores del sistema financiero moderno.
La Orden del Templo, orden de los Caballeros Templarios, había sido aprobada de manera oficial por la Iglesia Católica en el año 1129. Ellos conformaban las mejores unidades militares que combatieron en las Cruzadas. Fueron los miembros no combatientes los que se dedicaron a gestionar la actividad financiera de esa orden.
De ahí que los Caballeros Templarios fueran un referente importante en Europa que, al ser perseguido después por la misma Iglesia Católica para su exterminio, fue lo suficientemente trascendente para que el imaginario colectivo de la época relacionara aquel Viernes 13 con la mala fortuna.
Donald Dossey, científico avocado al estudio del comportamiento humano, dice que las personas "tienen miedo de que algo trágico o siniestro suceda en éste día". Dossey le dio el nombre en inglés a la Friggaatriscaidecafobia, la fobia al Viernes 13 –una prueba de que el científico no sufre de Hipopotomonstrosesquipedaliofobia, el miedo a la pronunciación de palabras largas.
La raíz de este miedo innato a este día parte, en algunos casos y en los extremos, en la fobia al número 13, la Triscaidecafobia. El supuesto número de mala suerte, según los Triscaidecafóbicos, es la razón detrás de la explosión del Apolo 13, pues despegó a la 1:13 pm exactamente (13:13) el 4/11/70 (cifras que suman 13 individualmente).
Pero los orígenes de todo este miedo al número 13 y el viernes 13 están aún abiertas al debate. Algunos dicen que el miedo al 13 tiene que ver con Jesucristo, que fue crucificado un viernes después de una última cena a la que asistieron 13 personas, uno de los cuales fue Judas Iscariote. En la corriente mística judía de la Cábala, son 13 los espíritus malignos mencionados. En el Tarot el 13 es el número de la muerte. En la Biblia, en el Apocalipsis, en el capítulo 13 se menciona y anuncia al anticristo.
En cuanto al Viernes 13, lo relacionan con un viernes 13 de octubre en el año 1307 en el que muchos Caballeros Templarios fueron arrestados y luego quemados por la Santa Inquisición. Los registros históricos indican que fue exactamente ese día. Los Caballeros Templarios eran reconocidos, en esa época, por ser prestamistas en Europa, una especie de precursores del sistema financiero moderno.
La Orden del Templo, orden de los Caballeros Templarios, había sido aprobada de manera oficial por la Iglesia Católica en el año 1129. Ellos conformaban las mejores unidades militares que combatieron en las Cruzadas. Fueron los miembros no combatientes los que se dedicaron a gestionar la actividad financiera de esa orden.
De ahí que los Caballeros Templarios fueran un referente importante en Europa que, al ser perseguido después por la misma Iglesia Católica para su exterminio, fue lo suficientemente trascendente para que el imaginario colectivo de la época relacionara aquel Viernes 13 con la mala fortuna.
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