Un hombre de 56 años de edad fue aplastado hasta la muerte al quedar sepultado bajo un enorme montón de judías pintas en un almacén de grano en Colorado, donde el fallecido trabajaba.
Los equipos de rescate tuvieron que utilizar hasta una pala excavadoras para quitar “varias toneladas de este tipo de habichuelas” hasta encontrar el cuerpo de Raymond Segura Jr., un asalariado de origen latino de la compañía Kelley Bean Brush, a la que pertenecía la granja donde se produjo el luctuoso suceso.
Su cuerpo no resistió la presión de tamaña mole de judías, mientras decenas de trabajadores de los servicios de rescate, y hasta cuatro reclusos de la cárcel del condado que andaban por allí, pasaban más de una hora cavando a través de un montículo de 6 metros de altura para llegar hasta él. Pero fue demasiado tarde.
El operario tenía 15 años de experiencia en la manipulación de granos y fue declarado muerto en las mismas instalaciones de la compañía en la tarde del jueves pasado, según informa Reuters.
Las autoridades aún están investigando cómo Raymond Segura Junior pudo terminar debajo de las judías pintas, aunque se especula que pudo producirse un colapso o rotura de uno de los silos donde se almacenaban, atrapando la rápida avalancha al infortunado de manera fortuita.